Alas rotas

   Vi una mariposa con las alas rotas, no me di cuenta hasta acercarme porque lo que me atrajo a ella fueron sus colores y su aleteo, volaba y regresaba al mismo lugar y eso me permitió ver que a pesar de sus alas rotas su esencia es volar. Recordé que tenemos nuestra esencia y la negamos a diario, la esencia es lo que somos naturalmente, lo que nos hace auténticos y únicos, dejemos a un lado el propósito de vida, el objetivo o nuestra meta, la esencia es nuestra naturaleza. Qué haríamos naturalmente si alguien tropieza, o si escuchamos una canción que nos conecta, qué hacemos naturalmente si tenemos hambre o sueño? Eso es lo natural y, Qué hay en nuestra esencia? Los valores que nos humanizan, que nos permiten ver al otro con los mismos ojos que nos vemos a nosotros mismos. Entonces, cómo negamos esa esencia? Con mil justificaciones. No confiamos  porque ya se ha conocido la traición, la desilusión, frustración, etc., no amamos  porque ya lo hicimos y salimos lastimados, que es mejor guardar que compartir porque en una necesidad nadie ayuda, que mejor no pedir favores porque luego se pagan caro,  en otras palabras como la mariposa tenemos las alas rotas, pero no me extrañó ver a una mariposa volando a pesar de tener las alas rotas, porque es su naturaleza volar!

      Me llama la atención que nosotros si dejamos a un lado nuestra naturaleza que es confiar, amar, compartir, etc por creencias aprendidas, la mariposa no deja de creer que es mariposa y que vuela quizá porque volando se lastimó, continua siendo lo que és. Qué pasa cuando negamos nuestra esencia? Creo que dejamos de ser auténticos, entonces le damos más importancia a fingir, a crear imágenes, a creer más en las experiencias que en nuestra esencia, a protegernos de lo que es natural en nosotros, es decir, aprendemos a protegernos de nosotros mismos, tiene lógica? Para mi es totalme antinatural, pero aprendido al fin.

     Podríamos permitirnos que nuestra esencia nos transforme y salir del capullo que hemos elaborado para protegernos de nuestra propia naturaleza y mostrarle al mundo nuestras alas, porque imagino que es más lindo ver un entorno lleno de colores que se mueven, que un árbol lleno de capullos colgando por miedo a salir y desplegar su esencia para llegar a otros, aunque también es naturaleza de la oruga la sabiduría que al salir, no importa lo que suceda o lo que encuentre, no importa si un día rompen sus alas, porque una vez salga del capullo nunca dejará de ser mariposa.